En
este ensayo de hoy tenemos que hablar sobre el siguiente tema: la gente joven. “Juventud divino tesoro”, como solía
decir mi abuela con un todo un tanto irónico siempre que mi madre le contaba
algo malo que había hecho yo.
Falta de ideales, falta de sacrificio, falta de motivación, moverse simplemente por la tendencia que marca la sociedad en ese momento, en definitiva, no pensar y actuar tú mismo, sino como la mayoría de la gente.
Falta de ideales, falta de sacrificio, falta de motivación, moverse simplemente por la tendencia que marca la sociedad en ese momento, en definitiva, no pensar y actuar tú mismo, sino como la mayoría de la gente.
A
mi forma de ver esto, entre otras muchas cosas que si empiezo a contar no
acabaría nunca, es lo que le ocurre a la gente joven. Muchos de nosotros (en
los cuales me incluyo a mí, porque no soy ningún santo) nos regimos por la ley
del mínimo esfuerzo. Ante cualquier adversidad enseguida nos rendimos, se
abandonan los estudios, se deja de buscar trabajo y pensamos que, “claro, como tenemos a nuestros padres que
nos mantienen, para que voy a intentar hacer algo, total no pasa nada”.
Sino está la excusa de “¡Va! Si hay
5.000.000 de parados en este país, como voy a encontrar empleo”. Pues mi
chico, si no sales a buscarlo seguro que a casa no te van a llegar las ofertas.
Otro problema que veo yo es que muchos de
los jóvenes carecen de ideales propios. Actúan según la forma de pensar de sus
amigos, se visten de una determinada manera simplemente para parecer “guays”
ante sus amistades, cometen actos que nunca harían simplemente porque todos lo
hacen… Muchas veces me ha tocado oír en una conversación lo siguiente:
“Y tú, ¿por qué estás en esta
manifestación? ¿Por qué haces huelga?”
- Y escuchar:
“Pues no lo sé, todos lo hacen y además es un
día de fiesta”.
Es
muy raro hoy en día poder hablar de política con un joven y que aquello que él
dice lo pueda defender con argumentos coherentes. Teniendo una visión global de
la situación por la que pasa nuestro país, si que es cierto que las
circunstancias no son adecuadas para que la juventud progrese porque cada vez
hay menos ayudas y hay un cierto sentimiento de que todo está perdido pero no
hay que generalizar, ya que también tenemos a personas muy cualificadas entre
nosotros y muy bien preparadas para el futuro que están esperando, no solo
esperando, sino buscando su oportunidad.
Con
todo esto lo que quiero decir es que los jóvenes debemos tener nuestros propios
principios, no actuar según la masa de gente que nos rodea, saber por qué hacemos o dejamos de hacer una determinada acción, en definitiva actuar como es
uno mismo; escuchar, pensar y hacer (en ese orden) lo que tú consideres
correcto en cada situación y marcar tu propia vida sin rendirte ante ningún
impedimento, porque, ¿quién dijo que esta vida fuera fácil?
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